El desayuno casero es espectacular, pero la calefacción en la habitación era difícil de regular y hacía calor por la noche.

La estancia fue buena, con habitaciones muy limpias y cuidadas. El personal fue amable y atento, lo que mejoró la experiencia. Sin embargo, la calefacción en la habitación era difícil de regular y hacía frío por la noche, lo que afectó algo mi comodidad.

Las camas eran cómodas, lo que ayudó a un buen descanso en medio del caos. La limpieza de las habitaciones fue aceptable, lo cual es importante después de un día ajetreado.

La experiencia no fue del todo placentera. Antes de las 10 de la mañana, la aspiradora resonaba por los pasillos, interrumpiendo el descanso. Además, la calefacción central no funcionó como debería y la temperatura, especialmente por la noche, fue bastante fría. En verano, las habitaciones se calientan mucho, haciéndolas incómodas, y la falta de mosquiteras dejó algunas criaturas indeseadas entrar. Definitivamente, hay que mejorar el sistema de calefacción y cuidar el descanso de los huéspedes.

Prueba el desayuno casero, ¡es una delicia! Además, la limpieza de las habitaciones es impecable.

la habitación contaba con un acogedor altillo para los niños

cómoda cama, vista tranquila

habitación pequeña

el hotel saueth es un lugar acogedor donde te sientes como en casa. el desayuno es delicioso, lleno de productos caseros. la atención del personal es excepcional y te hacen sentir muy bienvenido.

Qué delicia de estancia! El desayuno estaba espectacular, especialmente los bizcochos caseros. La habitación era acogedora y muy cómoda. Definitivamente, volvería a quedarme aquí.

Ideal para familias

La ubicación es excelente para empezar múltiples senderos. La cama era increíble, dormimos mejor que en casa, y el personal muy acogedor.

No era barato, pero el precio era aceptable.

Ubicación espectacular, ideal para arrancar caminatas. Habitaciones cómodas con buena limpieza. La atención del personal, un lujo, siempre buena onda y dispuestos a ayudar. El desayuno, una delicia, los bizcochos caseros volaron. Rio sonando de fondo, un verdadero relax.

Nos encantó la estancia! La limpieza fue impecable y el desayuno con productos caseros fue una verdadera delicia, junto a un trato excepcional del personal, ¡todo un lujo!

Qué maravilla de estancia! Los desayunos eran un festín, bizcochos caseros que volaban, mermeladas que te transportaban y el sonido relajante del río acompañándote. Además, la habitación que elegimos era como de cuento, con vistas a la cascada y una cama tan cómoda que dormí como un bebé. Sin duda, un lugar para volver.

Pequeños detalles que podrían mejorar, el acceso al balcón fue un poco complicado y la ducha tenía un par de problemitas. Aunque esas cosas no opacaron el encanto de nuestra estancia, es algo a tener en cuenta para el futuro.

Ubicación excepcional y un personal encantador. Las habitaciones son cómodas y limpias. Un hotel perfecto para los amantes del esquí y la naturaleza.

El agua caliente duró menos que mi último romance. ¡hay que mejorar eso!

La habitación era acogedora, con buena calefacción y muy limpia. El ambiente del lugar es relajante, y escuchar el río desde la ventana es un lujo. Aunque la variedad del desayuno podría mejorar un poco, las opciones caseras estaban deliciosas. Sin embargo, el agua caliente duró poco, lo que fue un inconveniente. A pesar de eso, la atención del personal fue excepcional y ayudó a que la estancia fuera agradable.

Descanso y buena onda.

Estuvimos con unos amigos y la verdad que estuvo genial. Las camas eran super cómodas y la atención del staff fue muy amable siempre. El desayuno casero estaba buenísimo, sobre todo los bizcochos. Una cosa a considerar es que podría haber más variedad en el menú de desayuno. Nos quedamos a 1 noche pero fue muy agradable.

Este lugar me viene perfecto. Tienen wifi, una tienda de café y un televisor de pantalla plana. Al llegar, el personal me ayudó dándome consejos sobre divisas que recuerdo con cariño. ¡Recomiendo el desayuno! Regresaré para año nuevo.